Para poder entender un poco la dicotomía entre las ciencias y lo divino[1] y saber cual de los dos conocimientos poseen la razón de las cosas y analizar de forma simple cuando comienza esta gran disputa, debemos remontarnos primero que nada a los principios de todo, del mundo, de la naturaleza, del hombre, etc. Partiendo básicamente con la religión para luego continuar con la ciencia y así hacernos una pequeña idea de cual es valida al momento de creer.
Según algunas religiones la creación de todo, proviene de la mano divina de Dios, catolicismo, cristianismo entre otras postulan a la teoría de que todo fue obra de un “ser” superior, convirtiéndolo de esta forma en el primer gran artesano puesto que lo ha creado ha sido una idea a su semejanza, el resultado de esto es lo que somos en la actualidad un producto mas evolucionado que el prototipo inicial y al cual le debemos agradecer todo lo que tenemos hoy, en el sentido de la natura y del dialecto puesto que una vez estando en el Edén y al momento de comer del fruto prohibido esto tendría una grave consecuencia según el Génesis esto es lo que sucedería si el hombre comía de este fruto “Es que Dios sabe muy bien que el día en que comiereis de él, se os abrirán los ojos y seréis como dioses, conocedores del bien y del mal” Génesis 3:5 . En el Génesis (que en griego significa nacimiento, creación, origen), es el primer libro del Tanaj[2], donde se relata la creación y las primeras consecuencias del hombre en la tierra.
En sus tres primeros capitulo (el Génesis), nos habla de la creación de la tierra, del hombre y de la mujer, y la expulsión de estos dos del paraíso del Edén, un relato místico, lleno de magia, fantasía, sería la postura de cualquier científico al momento de referirse a el, por no decir un libro que nos no deja ver la realidad de las cosas o nos oculta esta poniéndonos en una postura poco creíble para el razonamiento actual del hombre. Unos de los problemas que se enfrenta esta postura es la falta de pruebas físicas puesto que toda su crea habilidad se basa en una postura fehaciente, de la cual no podemos obtener una prueba de algo palpable que nos demuestre la existencia de está solo un estudio bíblico y nuestra fe son lo suficiente para poder entender de que este tipo de conocimiento es cierto, verdadero y no necesita demostrar algo para que su postura sea valida, no es lo mismo que decir que Juana de Arco era enviada por Dios para salvar a Francia de los ingleses según ella, pero al momento de pelear contra los ingleses, el demonio la poseía completamente convirtiéndola en una heroína para toda una nación. Pero volviendo al caso de la creación no hay pruebas físicas de tan fantástico terreno, pero en el texto nos encontramos con la ubicación de unos ríos que nos pueden llevar a esta localidad los que se encuentran en el interior del jardín del Edén[3] al reconocer los nombres de estos podemos estar ante una prueba necesaria para concretar el conocimiento y lograr que esta postura sea verídica, pero esto no es suficiente como para decir que la creación de todo proviene de una mano divina y por este motivo es fuertemente criticada por la ciencia derecho que posee esta, puesto que se basan en hechos reales e experimentales al momento de plantear una nueva teoría y así darle una razón de peso a los conocimientos que esta nos quiere entregar, al igual que la historia es demostrada con hechos reales concretos de los sucedido, por esto que los mitos divinos que quieren ser la razón y base de todo conocimiento no son verdaderos y no se pueden poner a la par con la ciencia. Incluso una pintura nos demuestra hechos de algo que el artista quiere decir y expresar mediante su obra, tenemos el caso del realismo, que planteaba toda una forma de pensar, expresar y observar la realidad europea de las primeras décadas del siglo XX.
El Tanaj apareció entre los años 40 – 70d.c, después de las grandes civilizaciones, y claramente después de la muerte de Jesús, por lo tanto perfectamente el autor anónimo ya que no tenemos certeza del nombre de este, por lo tanto él podría haber nombrado los ríos Eufrates y Tigris, simplemente por la cercanía de su lugar de residencia o por el simple conocimiento de estos, y no como una fuente fidedigna de lo sucedido, y de que a orillas de estos, existía el paraíso mismo y sus dos habitantes Adán y Eva, los primeros modelos de hombre y mujer creado por la mano divina de un artesano.
Pero cual es la postura de la ciencia contra la creación del mundo, de donde se basan ellos para saber cual es el punto inicial de este y así poder descalificar el conocimiento divino y establecer sus conocimientos como base de todo, unos de los hombres que habla de la teoría del desarrollo del hombre y su evolución es él británico Charles Darwin, autor del “El origen de la especies”, publicado en 1859, este relata que tanto el hombre como cualquier otra especie va evoluciona constantemente y a su vez se adapta a su entorno, estos postulados Darwin los escribió mientras realizaba una viaje en el Beagle y al momento de pasar por el extremo sur de nuestro país y tomar contacto con los onasse dio cuenta de cómo estos hombres, mujeres y niños que andaban desnudo en un clima completamente frió eran capaces de sobrevivir, podemos llevar esta teoría a los que nos relata Feyerabend, en su libro Las Conquista de la abundancia. La abstracción frente a la riqueza del ser”, donde nos dice lo siguiente: “Los factores culturales, no la suficiencia empírica, determinaron la supervivencia de una y la desaparición de la otra”[4] . Al momento de comparar esta frase con los postulados de Darwin, podemos ver que el conocimiento al igual que las especies va en constante evolución y la teoría más efectiva es que la sobrevive ante las otras y sobre todo aquellas que demuestren hechos concretos y reales de lo que están planteando, por este motivo es que el conocimiento verdadero pasa a ser una ciencia exacta, puesto que debemos demostrar realidades tanto físicas como experimentales, y dejando solo el conocimiento divino como algo mitológico de una tierra o solo como una simple musa para los artista lo cual hoy en día ya es pasado puesto que hasta los contenidos que posee un artista de hoy están fundamentado bajo una escrita metodología de estudios ante de pintar, componer o realizar cualquier obra plástica, dejando obsoletas a las otras (dejando de lado la idea de musas), esta constante evolución se va dando más en el ámbito de todo conocimiento ya sea este científico, histórico o cultura, exceptuando el conocimiento divino puesto que hoy en día son pocas las culturas que poseen dioses como las primeras civilizaciones y ya no es una practica muy frecuente de encomendarse a ellos y sobre todo basarse en sus conocimiento.
De esta forma podemos plantear la primera disputa entre el conocimiento otorgada desde los principios de la humanidad, saber de donde provenimos, ¿Cómo comenzó todo?, si ahora somos una evolución mejor lograda de los primeros hombres o si hemos mejorado en cuanto al diseño de la mano divina creadora, pero la única postura que nos presenta una prueba que no sea fehaciente sino verdadera es la ciencia esta siempre nos otorgara muestra de sus estudios y tendrá una postura real y verdadera ante los hechos que estudian, aunque debemos mantener claro que algunos sucesos no tienen una explicación lógica y pasan a ser un simple mito de lo divino y comenzar a buscar los porque es comenzar a buscar la existencia de ese Dios para que nos explique con fundamentos reales la causa de ese porque, por ejemplo si a la ciencia le preguntamos como saben ellos que el hombre ha evolucionado constantemente y lo seguirá haciendo, como ellos poseen pruebas de los sucedido hace más de miles de años, al igual que la historia que también que tienen pruebas de los sucedido ellos nos dirán que las respuesta de eso se encuentra en los fósiles en el caso de la ciencia y en las ruinas y objetos encontrados en la historia, por este motivo que el conocimiento de la ciencia y historia se derivan en ramas especializadas las cuales presentas su propia metodología para el desarrollo de la investigación y poder encontrar respuesta, incluso el Arte posee a grandes estudioso que nos describen y nos explica lo sucedido en los principios y no cabe duda que los estudiosos de lo divino hace lo mismo para poder meter en primera plana sus teorías y así poder enfrentarse con pruebas fehacientes ante la ciencia y poder terminar una vez con la disputa de cual posee la razón ante todo.
El conocimiento siempre será fundamental para la humanidad buscando las respuesta para todo, obviamente el grado de conocimiento que posee una persona actual, con el grado de conocimiento que poseía un griego bajo la influencia de los grandes filósofos como Platón o Aristóteles no es el mismo, partiendo de la base que el conocimiento de ese individuo griego es básicamente divino ante el conocimiento de una persona de hoy en día en día que se basa más en lo científico (aunque esta persona se considere estudioso de lo divino), porque sin lugar a dudas posee claros conocimiento de cómo se producen ciertos fenómenos científicos y a su vez la utilización de tecnología para su desarrollo también influye, el problema de estas personas en tener claro que posee dos tipos de conocimiento en su mente, y mantener un orden dado, los historiadores por su parte es fundamental conocer las dos caras de la moneda, puesto que unos de los conocimiento con mayor errores de información o mejor dicho con más fuentes de investigación y de establecer una metodología razonable es la historia, me explico un ejemplo claro son las guerras, estas poseen dos puntos de vista bando A y bando B y tiene dos lecturas puesto que algunos pueden decir que el bando A es el malo, invasor o represor convirtiendo de esta manera al bando B en victima, pero esto puede cambiar al momento que un historiador presente que es al revés la situación, y de esta forma puede alterar completamente el orden de la historia y a su cambiar el conocimiento agregándole nueva información , por estos motivos que al momento de realizar una investigación histórica la metodología a utilizar debe ser lo más parcial posible para aclarar el conocimiento si esta no es parcial y es cargada a un lado el caos es seguro puesto que al momento que aparezca la contra teoría de los hechos, la primera puede quedar obsoleta permitiendo de manera simple la evolución del conocimiento, siempre y cuando este tenga cosas para demostrar que realmente es valido.
El conocimiento basado en aquellos dioses que los pueblos antiguos veneraban por sus conocimientos ha quedado de lado, esta práctica ya no es fundamental al momento de adquirir un tipo de conocimiento, antiguamente no era simple aprender puesto que el conocimiento no se encontraba a disposición de todos, hoy en día y gracias a la invención de la imprenta, lenguaje y escritura se ha podido masificar el conocimiento tanto de la ciencia como el divino ya que el boca a boca de este ultimo conocimiento se ha adecuado a los avances tecnológicos de nuevas formas de transportar lo simple y amplio del nuevo saber.
[1] Entendamos como divino todo lo referido a Dios y a lo sublime que son las ARTES.
[2] El Tanaj es la Biblia Hebrea, conocida por los cristianos como el Antiguo Testamento.
[3] LA SAGRADA BIBLIA, Traducción de la Vulgata Latina al español por Félix Torres Amat. Editorial Sopena Argentina, S.R.L 1º edición 1950 En el capitulo 2 Pág. 7-8 del libro del Génesis en la Biblia a partir del versículo 10 al 14, nos relata lo siguiente:
10.- De Edén salía un río que regaba el jardín, y desde allí se repartía en cuatro brazos. 11.- El uno se llamaba Pisón: es el que rodea todo el país de Javilá, donde hay oro. 12.- El oro de aquel país es fino. Allí se encuentra bedelio y el ónice. 13.- El segundo río se llama Guijón: es el que rodea el país de Kus. 14.- El tercer río se llama Tigris: es el que corre al oriente de Asur. Y el cuarto río es el Eufrates.
[4] FEYERABEND, Paul. La conquista de la abundancia. La abstracción frente a la riqueza del ser. Título original: Conquest of Abundante (1999). Trad.: Radamés Molina y César Mora. Ediciones Paidós, S.A., Barcelona 2001. Capitulo 1. El realismo y la historicidad del Conocimiento. Pág 160.
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